Una de las cosas que más me impactó fue cuando vi los helicópteros caer, los motores congelados, o el barco que entra por la ciudad, que tomas más bien realizadas, obviamente son parte de la película “El día después de mañana”.
Pero reflexionando en esto del título de la película, somos un poco engreídos, por no decir que medio fanfarrones, pues la verdad no podemos contar con lo que no tenemos, y lo único que tenemos hoy es eso mismo “hoy”.
Hoy debemos tomar las decisiones correctas.
Hoy deberíamos abrazar a quien lo necesita, o tal vez sea yo quien lo necesite.
Hoy debemos bajar la guardia y reconciliar los corazones.
Hoy debemos reflexionar en la necesidad de buscar a Dios con todo el corazón, no con las palabras.
Dejemos de ser tan futuristas, es hoy lo que tenemos.
Hoy mas que ayer necesitamos volvernos a aquel que dios todo en aquella cruz dolorosa y lo hizo por amor, es hoy que necesitamos su intervención en nuestra vida no mañana, vamos anímate y llámalo por su nombre. Se llama Jesús y hoy sigue haciendo lo mismo que ayer, sanando corazones y restaurando vidas.
Mas yo, a ti pido auxilio, SEÑOR, y mi oración llega ante ti por la mañana. Salmos 88:13
PabelBG